Menorca
ha sido, desde la prehistoria hasta tiempos muy recientes, lugar de
paso de distintas culturas a causa de su situación estratégica en
el centro del Mediterráneo occidental, que ha propiciado que desde
los albores de los tiempos diferentes pueblos hayan codiciado la isla
como puerto de escala y refugio. Unos y otros dejaron un rico legado
histórico en la isla, que hace del más oriental de los territorios
de la Baleares una tierra con un relevante patrimonio. Es por ello
que historiadores y arqueólogos han considerado que Menorca
constituye un auténtico museo al aire libre. Tanto su prehistoria
como la historia son tan intensas que parecen impropias de un
territorio de tan reducidas dimensiones.
La
riqueza cultural y patrimonial de Menorca es innegable. Los edificios
y monumentos de mayor representatividad se encuentran articulados
mediante la Red Menorca Monumental (www.menorcamonumental.org),
y algunos son accesibles:
Museo de Menorca, en Mahón. Es totalmente accesible.
Se
trata de un museo en el que recorrer la historia de la ocupación
humana de Menorca a través de sus bienes muebles. Destacan las salas
dedicadas a la prehistoria, la historia antigua y al s. XVIII, así
como el antiguo claustro de monjes franciscanos donde se ubica.
Museo Hernández Sanz - Hernández Mora, en Mahón. Es totalmente
accesible.
En
este museo, instalado en el primer piso del Claustro del Carmen, se
puede admirar la obra gráfica y artes decorativas de los s. XVIII,
XIX y XX.
Fortaleza La Mola, al norte del puerto de Mahón. Gran parte del
recorrido es accesible, así como la recepción y los baños.
También
conocida como fortaleza de Isabel II, fue construida entre los años
1850 y 1875 y está situada en uno de los lugares más espectaculares
de la isla. Es un excelente ejemplo de la arquitectura militar de
finales del siglo XIX.
Fuerte de Malborough, en Cala Sant Esteve (Es Castell). Las galerías
y el foso tienen un buen grado de accesibilidad, aunque no se puede
subir al recinto superior.
Construido
por los británicos entre 1710 y 1726, es una edificación excavada
en la roca: la visita transcurre por las galerías subterráneas, las
contraminas, las salas excavadas en la roca, y después el foso y el
recinto superior (no accesible). El montaje expositivo explica la
historia de Menorca y de Europa a lo largo del convulso s. XVIII.
No hay comentarios:
Publicar un comentario